Construyen planta alterna para poner a funcionar la RSU
El nuevo equipo cumplirá la función de coger los residuos del Magic Garden para someterlos a un tratamiento de limpieza mediante un proceso de biosecado y luego pasarlos a la planta RSU para que sean eliminados.
El día 15 de abril se iniciaron las obras civiles de construcción de la edificación donde funcionará la máquina de Combustibles Derivados de Residuos, CDR, que permitirá trabajar a la planta de Residuos Sólidos Urbanos, por primera vez desde que fue instalada, y el pueblo de la isla pueda ver desaparecer, en unos años, la montaña de residuos que se levanta en la zona de Punta Evans.
El sistema alterno que permitirá que la montaña de basura del Magic Garden desaparezca para mejorar la salud de los habitantes de esa zona, se construye con recursos aportados por el departamento y el Ministerio de Vivienda, los cuales superan los 15.000 millones de pesos.
La planta alterna será comprada en Bélgica, pero debido a la emergencia sanitaria, generada por la pandemia del covid-19, en estos momentos no se ha podido concretar su compra.
Para que la planta de Residuos Sólidos Urbanos pueda funcionar se deberá instalar una maquinaria alterna que se encargará de hacer un proceso de biosecado a la basura que se encuentra en el relleno sanitario por espacio de 21 días. Luego de este trabajo los residuos saldrán completamente limpios y convertidos en forma de pelota de unos 20 centímetros, y seguidamente pasarán a la RSU, donde serán quemados mediante un sistema de combustión, proceso que se convertirá en un aprovechamiento energético para los habitantes de esta ciudad.
La planta alterna será comprada en Bélgica, pero debido a la emergencia sanitaria, generada por la pandemia del covid-19, en estos momentos no se ha podido concretar su compra, sin embargo, las obras civiles que, en estos instantes es lo más importante, ya arrancaron para satisfacción de los habitantes y el Gobierno del departamento.
Una fuente informada dijo que el relleno sanitario o basurero a cielo abierto Magic Garden se encuentra en un proceso de optimización. En el lugar se ejecutan trabajos de minería para tratar de alargarle la vida útil, los vasos están totalmente definidos y cubiertos con una geomembrana para evitar los incendios y el esparcimiento de los residuos. Asimismo, se hizo una deforestación que fue avalada por la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Archipiélago, Coralina, y que contempla una compensación por parte del contratista del basurero.
Las autoridades sanitarias manifestaron que la planta tiene como meta llevar a Colombia en el año 2022 al aprovechamiento de un 8 por ciento a un 15 por ciento de sus residuos y, de paso, situar al país en el 2030 como líder en América Latina en aprovechar su propia basura.
También se han mermado y neutralizado los olores en la zona. Y para el buen manejo de los lixiviados se han hecho lagunas pequeñas de oxidación para canalizar todos estos líquidos residuales tóxicos y evitar así que corran hacia los humedales que se encuentran cerca del área.
Una de las metas que se propuso el gobernador durante su campaña fue poner a funcionar la planta RSU. Al llegar al Palacio de los Corales el mandatario asumió el conocimiento del contrato y dispuso hacer unas modificaciones a su texto para corregir unos vacíos que presentaba en el sentido del pago de anticipo que es del 40 por ciento, que equivale a la suma de 6.000 millones de pesos, correspondiente a los 15.000 millones de pesos que están estipulados en el acuerdo contemplado en un fallo promulgado por el Tribunal Contencioso Administrativo, donde dice que en 6 meses la planta RSU debe estar en funcionamiento, dijo la fuente que suministró la información.
La planta RSU del Magic Garden comenzó a ser construida en el año 2011 con una inversión del orden de los 38.000 millones de pesos. Una visita que se le hizo el año pasado dejó ver que se encuentra en buenas condiciones. Las autoridades sanitarias manifestaron que la planta tiene como meta llevar a Colombia en el año 2022 al aprovechamiento de residuos de un 8 por ciento a un 15 por ciento y, de paso, situar al país en el 2030 como líder en América Latina en el aprovechamiento de su propia basura.